“Don Carlo”, una historia de tragedia y amor ambientada en la época de Felipe II, se representará también los días 18, 21, 26 y 29 de diciembre en una producción de la Ópera Nacional de París que cuenta con Lorin Maazel en la dirección musical y como director de escena con Graham Vick, uno de los más prolíficos y galardonados directores de ópera de la actualidad. En cuanto al reparto, destaca la presencia del joven cantante coreano Yonghoon Lee, quien sustituirá en el papel protagonista a Marcello Giordani que ha causado baja por enfermedad.

Junto a esta “futura estrella de la lírica mundial”, según le definió Schmidt, estarán Orlin Anastassov, que interpreta a Filippo II; Carlos Álvarez, que da vida a Rodrigo; y Eric Halfvarson, en el papel de Il Grande Inquisitore. Otros de los intérpretes son Ángela Marambio, que da vida a Elisabetta di Valois; Nadia Krasteva, como la Principesca d'Eboli. Todos ellos estarán acompañados por la Orquestra de la Comunitat Valenciana y el Cor de la Generalitat.

Carlos Álvarez, quien ya participó en esta producción en 2001 en el Teatro de La Bastilla, consideró que lo que distingue a este montaje es, en primer lugar, la puesta en escena de Graham Vick, quien es 'siempre muy minucioso a la hora de afrontar la partitura y el libreto --basado en el drama “Dom Karlos, Infant von Spanien” de Schiller-- y es capaz de hacer lecturas muy honestas con lo que el compositor quería en cada momento'.

Para ello, Vick “no ha recurrido al realismo sino que ha preferido inducir al espectador a imaginar espacios y situaciones ayudado por una escenografía simple que se apoya en la luz”. En este sentido, comentó que “Don Carlo” es “una ópera oscura dentro del período oscuro de la España del siglo XVI y esto se ve encima del escenario”.

No obstante, subrayó que “el énfasis se hace en la parte musical, y el maestro Maazel hace una lectura muy personalizada de cómo quiere este Don Carlo”. Agregó que la música de Verdi es “tan descriptiva que es capaz por sí sola de crear la atmósfera necesaria para expresar todos los sentimientos”.

Sobre su papel, aseguró que “éste es uno de los trabajos que me permite ser absolutamente bueno en el escenario, demostrar la capacidad del canto verdiano que puedo ofrecer y encarnar a un personaje que está dispuesto a poner la amistad por encima de su propia vida”.

Por su parte, Ángela Marambio resaltó su primer trabajo a las órdenes de Lorin Maazel, con quien ha habido “una comunicación perfecta porque tiene una visión muy clara de la ópera que nosotros finalmente compartimos”, explicó. Para la artista, es mayor la dificultad emocional que la técnica en esta ópera aunque reconoció que “cantar un Verdi requiere una gran vocalidad y haber superado muchas facetas técnicas”.

Nadia Krasteva, que debuta en España con este espectáculo, mostró igualmente su satisfacción por trabajar con Lorin Maazel, una oportunidad que ha surgido a través de su vinculación profesional con el tenor español Plácido Domingo. El bajo Eric Halfvarson se refirió a la importancia que el tema político tiene en esta ópera y a la reflexión sobre el enfrentamiento entre el Estado y la Iglesia que hizo Verdi.

Sobre la importancia del repertorio de Verdi, Helga Schmidt aseguró que este autor “estará, evidentemente, presente cada temporada con una o dos funciones al año” y recordó que el Palau de les Arts “quiere abarcar el repertorio italiano, barroco, la ópera alemana, francesa y también la checa contemporánea”.

hLm!.Noticias - Europa Press